Gracias a sus kilómetros de playas de arena blanca, su agua turquesa, su vegetación exuberante y el buen humor y la amabilidad de sus habitantes, el turismo en el Caribe converge poco a poco hacia la República Dominicana y por supuesto hacia Las Terrenas.
Este pueblo de pescadores, al origen, comenzó a desarrollarse hace menos de veinte años y se encuentra en pleno desarrollo desde hace unos años.
Cada vez más residentes y cada vez más turistas que viajan en la Península de Samaná, hacen de Las Terrenas uno de los polos atractivos más apreciados del país.